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El Parlamento de Budapest, también conocido como el Parlamento Húngaro, es uno de los edificios más icónicos y espectaculares de la capital de Hungría. Situado a orillas del río Danubio, este majestuoso edificio de estilo neogótico no solo es el centro político y legislativo del país, sino también una de las principales atracciones turísticas de la ciudad.
El Parlamento de Budapest, también conocido como el Országház, fue inaugurado en 1902 tras 17 años de construcción. Diseñado por el arquitecto Imre Steindl, este edificio neogótico es el tercero más grande del mundo de su tipo. Su diseño impresionante incluye elementos renacentistas y barrocos, combinados para crear una estructura verdaderamente monumental.
Con 691 habitaciones, 29 escaleras y 27 puertas, el Parlamento es un laberinto de esplendor arquitectónico. El exterior del Parlamento está adornado con 242 estatuas que representan figuras históricas y alegóricas de Hungría. La entrada principal, conocida como la Puerta de los Leones, está custodiada por dos enormes estatuas de leones.La cúpula central se eleva a 96 metros de altura, simbolizando la edad de consentimiento en 1896. Este año marcó el milenario de la fundación del estado húngaro.
Como moverse
El Parlamento de Budapest es fácilmente accesible en transporte público. La estación de metro más cercana es Kossuth Lajos tér, de la línea M2. También puedes llegar en tranvía, tomando las líneas 2, 2A o 2M, que recorren la orilla del Danubio y paran justo enfrente del edificio. Ubicación
Uno de los mayores atractivos del Parlamento de Budapest es la Sala de la Cúpula, donde se exhiben las joyas de la corona húngara, incluyendo la corona de San Esteban. Esta sala es un testimonio del esplendor y la importancia histórica del edificio. Otro punto destacado es la Escalera Principal, que impresiona con su alfombra roja, sus columnas de mármol y sus techos decorados con frescos.
Esta escalera te lleva directamente a la Sala de la Asamblea Nacional, donde se llevan a cabo las sesiones parlamentarias. Esta sala es igualmente majestuosa, con sus asientos de cuero, paneles de madera tallada y una cúpula decorativa. Está permitido tomar fotografías en la mayoría de las áreas del Parlamento, pero asegúrate de respetar las restricciones y no utilizar flash en las áreas donde esté prohibido.
Visitar el Parlamento de Budapest merece la pena no solo por su imponente belleza exterior, sino porque su interior guarda la verdadera alma histórica de Hungría. Este edificio, uno de los parlamentos más grandes y espectaculares de Europa, no es solo un símbolo político, es también un reflejo de la historia y la identidad del país. Su visita permite recorrer salas majestuosas, descubrir la impresionante cúpula central y admirar la Corona de San Esteban, una de las piezas más valiosas de la historia húngara. Además, las visitas guiadas aportan contexto y detalles que transforman el recorrido en un auténtico viaje al corazón político y cultural de Budapest.
El Parlamento de Budapest ofrece visitas guiadas en varios idiomas, incluido el español, que permiten explorar su opulento interior y conocer la historia del edificio, así como admirar la impresionante Sala de la Cúpula donde se exhiben las joyas de la corona húngara. Las visitas guiadas duran aproximadamente 1 hora y 30 minutos, mientras que las autoguiadas duran alrededor de 2 horas.
El precio de las entradas varía según el tipo de visita. Las visitas guiadas en inglés cuestan 6.000 forintos (unos 20 euros) para adultos, 4.500 forintos (unos 15 euros) para estudiantes y 3.000 forintos (unos 10 euros) para niños de 6 a 18 años. Las visitas en otros idiomas tienen un coste adicional de 1.000 forintos (unos 3,30 euros). Las visitas autoguiadas son ligeramente más baratas. Las entradas se pueden comprar en la taquilla del edificio, en la web oficial del Parlamento o en agencias de viajes locales Entradas web oficial
💡 Ticket de acceso al parlamento de Budapest con Audioguía
Para aprovechar al máximo tu visita al Parlamento de Budapest, aquí tienes algunos consejos útiles. Llegar con tiempo suficiente es esencial, ya que los controles de seguridad pueden demorar un poco. Lleva tu documento de identidad o pasaporte, ya que es requerido para entrar.
El Parlamento ofrece descuentos para estudiantes, jubilados y ciudadanos de la Unión Europea, por lo que es importante llevar una identificación válida para beneficiarse de estas ofertas. Aunque no existe un código de vestimenta estricto, se recomienda vestir de manera adecuada y respetuosa al visitar este edificio gubernamental. Usa ropa cómoda, pero adecuada para la ocasión.
El Parlamento está abierto todos los días de la semana con visitas guiadas que comienzan cada hora desde las 9:00 hasta las 16:00 horas. Las visitas autoguiadas se pueden realizar en cualquier momento durante el horario de apertura. Las medidas de seguridad son estrictas, por lo que es posible que debas pasar por un control de seguridad y dejar tus objetos personales en un guardarropa antes de comenzar la visita. Para más información, consulta la web oficial.
Budapest es una ciudad que deslumbra con su arquitectura majestuosa, pero nada me preparó para la imponente belleza del Parlamento de Hungría. Desde el momento en que lo vi reflejado en el Danubio, su silueta gótica y sus agujas elevándose al cielo me dejaron sin palabras.
Reservé una visita guiada para explorar su interior, y fue la mejor decisión. Al cruzar sus puertas, sentí que viajaba en el tiempo: techos dorados, vidrieras deslumbrantes y una cúpula impresionante que alberga la Santa Corona de Hungría, uno de los tesoros más importantes del país. Cada salón y pasillo reflejan la grandeza del Imperio Austrohúngaro, con detalles tan elaborados que es difícil creer que fue construido en solo 17 años.
Pero más allá de la arquitectura, lo que más me impactó fue la sensación de estar en un lugar lleno de historia. Desde discursos memorables hasta momentos clave de la política húngara, este edificio ha sido testigo de innumerables eventos que han moldeado el país.
Si visitas Budapest, el Parlamento es una parada obligatoria. Mi consejo: reserva con antelación y llega con tiempo para disfrutar del exterior.
Uno de los momentos más mágicos para ver el Parlamento de Budapest es durante la noche. El edificio se ilumina con una luz dorada, creando una vista impresionante desde ambos lados del río. Puedes disfrutar de esta vista desde el paseo a lo largo del Danubio o, mejor aún, desde un crucero nocturno por el río. Estos cruceros ofrecen una perspectiva única del Parlamento y otros monumentos iluminados de Budapest, haciendo de tu visita una experiencia aún más memorable.
El Parlamento de Budapest se ilumina durante la noche, aproximadamente entre las 17.00 y las 18.00 horas, dependiendo de la época del año. La iluminación se mantiene encendida hasta el amanecer.La oportunidad de capturar fotos memorables se presenta con la deslumbrante iluminación del edificio.
Ver la iluminación de Budapest desde un crucero turístico es una de esas experiencias que convierten una visita a la ciudad en algo inolvidable. Desde el agua, la perspectiva cambia por completo. El Parlamento brilla reflejado sobre el Danubio, los puentes iluminados crean arcos dorados sobre el río y edificios como el Castillo de Buda o la Iglesia de Matías se envuelven en una luz que hace que toda la ciudad parezca flotar.
Ten en cuenta que la hora exacta de encendido puede variar ligeramente según la temporada, y en ocasiones especiales, el Parlamento se ilumina con colores festivos durante las celebraciones nacionales.
Ver el Parlamento de Budapest iluminado al caer la noche es una de esas experiencias que nadie debería perderse. La silueta neogótica, reflejada en las aguas del Danubio, crea una imagen mágica que convierte la ciudad en un auténtico cuento de hadas. Esa luz dorada no solo resalta su belleza arquitectónica, también crea una atmósfera especial, casi irreal, que invita a detenerse y simplemente contemplar. Además, es el momento perfecto para un paseo nocturno por la orilla, donde Budapest muestra su lado más romántico y fotogénico. Para quienes buscan disfrutar la ciudad al máximo, esta vista es un imprescindible absoluto
Lo especial de verlo desde un barco es la sensación de estar justo en medio de ese escenario, rodeado de historia y belleza, mientras Budapest se muestra en su versión más mágica. Además, el crucero permite disfrutar de las vistas sin prisas, con la comodidad de un paseo relajado y la posibilidad de escuchar explicaciones sobre cada monumento. Es un plan perfecto para quienes buscan una experiencia romántica, fotogénica y, al mismo tiempo, llena de significado cultural.
Experiencias increíbles en Budapest
La Opera de Budapest, un majestuoso edificio que exhibe la grandeza arquitectónica, se erige como un símbolo cultural imprescindible. Desde allí, una breve travesía conduce al imponente Castillo de Buda, donde la historia cobra vida entre sus muros antiguos. Descendiendo por las sinuosas calles, se encuentra el conmovedor Monumento a los Zapatos, rindiendo homenaje a los que sufrieron durante momentos sombríos de la historia. Juntos, estos tres puntos destacados tejen una narrativa única que abarca la cultura, la historia y el recuerdo en el corazón de Budapest.
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